EL 8

El 8 es la última novela que me he leido. Dos historias entrelazadas con un nexo de unión, en principio casual: el Ajedrez de Montglane, un juego legendario, que se supone los musulmanes regalaron a Carlomagno, y que escondía en sus piezas y su tablero un enorme poder mágico, que no se revela hasta el final de la novela, pero que se va intuyendo debido a los personajes e historias que van apareciendo.





(para saber más sobre la leyenda del Ajedrez de Montglane, pinchad aquí)

Aunque la novela relata por encima la leyenda del Ajedrez, la historia comienza a finales del S.XVIII, en Francia, en los preámbulos del Terror, la Revolución Francesa. En la Abadía de Montglane, se desvela un secreto guardado durante 1000 años. El juego de ajedrez de Carlomagno se ocultaba en sus muros, y a la vez se protegía, pero el peligro se acercaba. Robespierre, Marat, Napoleón, ... y otros personajes históricos como Catalina la Grande o Casanova entrelazan su paso por la historia con la intención oculta de conseguir dicho juego y el poder que encierra.

Paralelamente, la novela nos va trasladando a la décda de 1970, donde en principio sin quererlo, una analista de sistemas informáticos se ve involucrada en la búsqueda del Ajedrez de Montglane.

Los personajes se convertirán en las piezas del propio juego, las dos historias irán tomano forma, forma de 8, un número clave durante todo el libro.

Lo que más he valorado de ese libro son los pasajes del s. XVIII. Me parece genial como mezcla las vidas de personajes de la Francia de la época, sumando a gente como Furier, Newton... con la leyenda del juego de ajedrez. También la importancia del ajedrez en si y cómo todo se va relacionando con movimientos o estrategia de este juego. La parte más pobre creo que es el final, no porque sea malo, sino orque me ha parecido un poco brusco, así como el resto de la novela está muy trabajada, creo que se le podían haber dedicado más páginas, pero es un detalle sin importancia comparndo con el conjunto.

Un gran libro que recomiendo que leáis. Espero que no sea el último que traigo al blog.

página web de Catherine Neville